La homocisteína es un aminoácido sintetizado de manera natural por el cuerpo humano. A pesar de que no es dañino a altos niveles se ha relacionado con la degeneración cognitiva. Por eso, lograr restaurar o mantener la homocisteína en cotas normales puede ser una manera eficiente de frenar enfermedades como el deterioro cognitivo leve, la demencia o el alzhéimer. Aunque, suponiendo que la relación sea certera, primero hay que descubrir cómo se puede romper o destruirla para que sus niveles no sean excesivamente altos.Al hilo de lo anterior, investigadores de la Universidad de Oxford han llevado a cabo una investigación, al parecer exitosa, en la que aumentando las dosis de vitamina B en personas mayores con síntomas de deterioro cognitivo han logrado reducir un 30% la degeneración del cerebro (en algunos casos la mitad).
De las 270 personas que participaron en el estudio, las 135 que recibieron el aumento de las dosis lograron mantener un funcionamiento cognitivo superior al de las personas a las que no se les suministro cantidades equivalentes de vitamina B.
En concreto, las dosis aumentadas fueron de vitamina B6, B9 y B12, con niveles superiores a 300 veces a los normales, a los que podemos ingerir con una alimentación rica en plátanos, carne, cereales…
Para David Smith, uno de los directores de la investigación, los resultados son muy positivos y son una sólida esperanza a la hora de luchar contra enfermedades como el alzhéimer que atacan de manera salvaje a nuestro cerebro.
A pesar de todo, y aceptando que sea algo muy positivo, no deja de ser un estudio más. Por eso son necesarias otras investigaciones que consoliden o corroboren las conclusiones aportadas. Y, sobre todo, es importante que nadie aumente con la ayuda de suplementos vitamínicos o a través de una mala alimentación la dosis diaria de vitamina B que pueda ingerir, porque lo único que estaría haciendo es perjudicarse.
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