A vueltas con Punset

A vueltas con PunsetA pesar de que hemos logrado conquistar prácticamente la totalidad de los rincones habitables de la tierra, de que hemos viajado (por lo menos como especie) a la luna y conocemos lo que ha sucedido a miles de millones de kilómetros de donde vivimos, somos unos completos ignorantes respecto a lo que ocurre dentro de nosotros, de nuestro cerebro. Apenas sabemos por qué amamos, odiamos o tenemos miedo. Apenas nos conocemos, por eso andamos perdidos en un mundo de decisiones racionales que no lo son en absoluto.

Sin embargo, claro que queremos saber lo que nos sucede, claro que queremos conocernos aunque sea una querencia no verbalizada. Necesitamos comprender por qué hacemos lo que hacemos o por qué queremos lo que queremos para poder adecuar mejor nuestros requerimientos o deseos a lo que podremos conseguir.

Esto es a lo que realmente Eduard Punset se dedica en la vida, o por lo menos es lo que le cuenta a Juan Fernández en una entrevista para el dominical de El País. Le dice a la gente «por qué le pasa lo que pasa por dentro» y en seguida le acogen y quieren ser su amigo. Este es, asegura, el secreto de su éxito, de su millón de libros vendidos o de sus 140.000 amigos en facebook.

Resulta que respecto a nuestras emociones somos igual que las perdices y las ratas, que a diferencia de los perros somos capaces de amar y odiar al mismo tiempo o que debido a nuestra obsesión por lo global, al contrario de los animales, nos perdemos la belleza de los detalles. Y, claro, tampoco damos la importancia que debiera tener al inconsciente. Estas cosas son las que nos cuenta Punset, y por eso le queremos tanto.

La inteligencia emocional, hasta hace relativamente, ha pasado desapercibida en el ámbito científico y era una completa desconocida en nuestra vida diaria, a pesar del tremendo peso que tenía (y sigue teniendo, por supuesto) en la toma de decisiones y en las relaciones interpersonales. Gracias a divulgadores como Eduard Punset, que presentan al gran público lo que los científicos descubren, vamos descubriendo qué es la inteligencia emocional y, de paso, nos vamos descubriendo a nosotros mismos. Que, al fin y al cabo, es de lo que se trata.

Comentarios